Hace muchos años, intentando entretenerme y no perder tanto el tiempo en mi vida, me inscribi en unos cursillos de creación literaria.
Se suponia que yo seria algo así como un chico gay culto e interesante, con el tiempo reconocí, que ni era culto, y muchas veces, tampoco era interesante, es más me di cuenta que el termino gay, no me acomoda tanto.
Pues en estos cursillos, intente crear, pero resulta que yo no creaba nada nuevo. Y como andaba super enamorado de un novio de aquella epoca, sólo podía pensarlo a él, soñarlo a él, recordarlo a él, y me valia madre todo lo demás. Pero a mis profesoras eso les valía un comino, yo tenía que entregar trabajos escritos y de preferencia con una intención "literaria".
Se suponia que yo seria algo así como un chico gay culto e interesante, con el tiempo reconocí, que ni era culto, y muchas veces, tampoco era interesante, es más me di cuenta que el termino gay, no me acomoda tanto.
Pues en estos cursillos, intente crear, pero resulta que yo no creaba nada nuevo. Y como andaba super enamorado de un novio de aquella epoca, sólo podía pensarlo a él, soñarlo a él, recordarlo a él, y me valia madre todo lo demás. Pero a mis profesoras eso les valía un comino, yo tenía que entregar trabajos escritos y de preferencia con una intención "literaria".
Pero yo sólo escribía para mi amor, para mi oscuro y joven enamorado, era un chico dark por eso le digo oscuro.
Fue, donde según yo escribía para mi oscuro amante, cuando descubrí que en mis escritos, mi egocentrismo, no me permitía escribir mas que de mí y lo que a mi alrededor sucedía y cómo era que yo lo vivía.
Fue, donde según yo escribía para mi oscuro amante, cuando descubrí que en mis escritos, mi egocentrismo, no me permitía escribir mas que de mí y lo que a mi alrededor sucedía y cómo era que yo lo vivía.
Las cosas no han cambiado. Sigo escribiedndo sobre mí y sobre lo que a mi alrededor sucede.
Pero ahora tiene una cierta utilidad, me permite conocerme y saber quien fuí y quién soy en la actualidad. Sigo escribiendo en medio de esta isla desierta, asi descubro que no me vuelvo loco, y que aun cuando esté en medio de la multitud, me encuetro sólo. A veces comparto mi camino, a veces comparto opiniones, a veces comparto el amor, o el odio, pero al final de cuentas, estoy solo.
Tan es así, que en el 1er, comentario que recibí en este blog me lo hizo una mujer inteligente y muy humana, Ma. José. Y me recordó algo que esta ligado profundamente a mi ser. La soledad.
Pero ahora tiene una cierta utilidad, me permite conocerme y saber quien fuí y quién soy en la actualidad. Sigo escribiendo en medio de esta isla desierta, asi descubro que no me vuelvo loco, y que aun cuando esté en medio de la multitud, me encuetro sólo. A veces comparto mi camino, a veces comparto opiniones, a veces comparto el amor, o el odio, pero al final de cuentas, estoy solo.
Tan es así, que en el 1er, comentario que recibí en este blog me lo hizo una mujer inteligente y muy humana, Ma. José. Y me recordó algo que esta ligado profundamente a mi ser. La soledad.
Es por ello, que soy el Príncipe de Sodoma.
Para mí, Sodoma es la ciudad de la soledad, porque es la ciudad que fue destruida por el odio y la incomprensión. Era la ciudad donde no quedaba nada más que ruinas y cenizas. Escombros y cuerpos calcinados. Es la ciudad donde solo existía la verguenza y del dolor.
Pero con el tiempo, sobre las cenizas y con un poco de humedad, renace la vida. La vida sin miedo, altiva y solitaria. Sodoma es la ciudad que sobrevive y se levanta en medio de la nada, contrala violencia y la homofobia.
Pero con el tiempo, sobre las cenizas y con un poco de humedad, renace la vida. La vida sin miedo, altiva y solitaria. Sodoma es la ciudad que sobrevive y se levanta en medio de la nada, contrala violencia y la homofobia.
Como si Sodoma fuera mi cuerpo material. Soy como una enredadera que crece entre los muros derruidos, ahora mis barricadas son las piedras que lanzaron para destruir mi casa, mi cuerpo.
Ahora las ruinas son mis cimientos, mis murallas y la cúpula de mi templo.
Ya no tengo miedo del dios patriarcal, no tengo miedo de sus lluvias de fuego ni de sus santas e infernales inquisiciones.
Hace mucho tiempo deje de pelearme con la soledad, no le tengo miedo a ella, descubrí que le tengo miedo a la melancolía. Tengo miedo de ser un anciano arrepentido por no haber vivido, por no haber sido atrevido y aventurero.
Es por eso que en el presente me levanto altivo, no importa que esté solo, no importa que me miren con asombro y frialdad. Ahora, desde mi soledad eterna, he surgido para conquistar mi libertad.
Ya no tengo miedo del dios patriarcal, no tengo miedo de sus lluvias de fuego ni de sus santas e infernales inquisiciones.
Hace mucho tiempo deje de pelearme con la soledad, no le tengo miedo a ella, descubrí que le tengo miedo a la melancolía. Tengo miedo de ser un anciano arrepentido por no haber vivido, por no haber sido atrevido y aventurero.
Es por eso que en el presente me levanto altivo, no importa que esté solo, no importa que me miren con asombro y frialdad. Ahora, desde mi soledad eterna, he surgido para conquistar mi libertad.
Ahora Sodoma es mi reino y es mi casa.
Aqui no hay puertas... Mi reino esta abierto a la paz, a la solidaridad, al canto y al silencio, a la ternura y la valentía.
Mi casa es la casa de la soledad.